Tras el fallecimiento de un ser querido se tienen que realizar una serie de trámites bastante incómodos y complicados para el estado emocional en el que nos encontramos en esos momentos. Esta situación lleva muchas veces a tomar decisiones precipitadas que generan gastos excesivos.

Nueva modalidad de servicios funerarios que no tienen que ser necesariamente utilizados por la persona que los adquiere.